La Comisión Europea (CE) estima que España podría optar por recurrir al fondo de rescate de la zona euro para sanear su banca definitivamente tras los problemas creados por el estallido de la burbuja inmobiliaria, según dijeron ayer fuentes comunitarias. El Gobierno español elevó en febrero hasta unos 52.000 millones de euros el saneamiento adicional que debe acometer la banca para cubrir su riesgo inmobiliario, pero en Bruselas se cree que esa cantidad puede no ser suficiente ante la magnitud de la crisis. Las autoridades españolas insisten en que con el saneamiento que se exige a la banca, ésta podrá volver a acceder a los mercados de financiación y así volverá a fluir el crédito.
Opción factible
En caso de que no fuera así, y dado que el recurso al capital privado se presenta muy difícil y que la aportación de más fondos públicos complicaría aún más la consecución del objetivo de déficit del Gobierno, el uso del fondo de rescate se presenta como una opción factible, añadieron las fuentes comunitarias.
Tanto el fondo temporal (FEEF) o tras su entrada en vigor el permanente (MEDE) pueden financiar recapitalizaciones de entidades a través de préstamos a gobiernos. Las fuentes -que hablaron con la condición del anonimato- apuntaron que es más barato y menos dañino para la imagen nacional recurrir al fondo de rescate para sanear la banca que para rescatar al conjunto de una economía nacional. Es decir, no supone estigmatizar la economía de un país. Los ministros de Finanzas de la zona euro tratarán de acordar el próximo viernes en Copenhague el reforzamiento de la dotación de los fondos de rescate.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, desmintió «absolutamente» querer acudir al fondo de rescate europeo y descartó que el Gobierno español «tiene su plan de reestructuración y saneamiento» del sistema financiero, del que además Bruselas tiene una visión «positiva». El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, ha considerado «infundadas» las informaciones sobre la posibilidad de que España opte por recurrir al fondo para sanear la banca definitivamente tras los problemas creados por el estallido de la burbuja inmobiliaria.