El Gobierno griego se mostraba ayer optimista sobre el resultado de la reunión del Eurogrupo en Bruselas, en la que se preveía dar luz verde al nuevo préstamo de 130.000 millones de euros y al proceso por el que se efectuará una quita de unos 100.000 millones de euros de la deuda del país en manos del sector privado.
«Estamos preparados para concluir este largo proceso» sobre la ayuda europea y la quita de la deuda, aseguró a su llegada a Bruselas el ministro de Financias griego, Evangelos Venizelos, antes de una reunión que se prolongó hasta bien entrada la noche.
El primer ministro de Grecia, Lukás Papadimos, dijo que su país esperaba cerrar «un largo período de incertidumbre que no ha beneficiado ni a la economía griega ni a la de la eurozona».
«Europa sabe lo importante que es enviar un mensaje claro de que las decisiones son completadas y puestas en práctica», afirmó el exbanquero, quien lidera como independiente un Ejecutivo de unidad.
Por su parte, el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, expresó su confianza en que se apruebara el segundo rescate a Grecia porque eso es «esencial» para evitar una suspensión de pagos desordenada del país.
«Espero que, tras semanas y meses de largas y difíciles negociaciones, los ministros puedan cerrar un acuerdo sobre un segundo programa para Grecia, incluyendo también una participación muy significativa del sector privado y la financiación del sector público», indicó Rehn en un mensaje grabado previo al inicio de la reunión del Eurogrupo.
«Esto es esencial para evitar una suspensión de pagos desordenada de Grecia y garantizar la estabilidad financiera en toda Europa», aseveró el vicepresidente de la Comisión Europea.
Mientras, en Grecia se vivió con cierta calma esta jornada crucial para el futuro del país, sin grandes manifestaciones, que están previstas sin embargo para mañana.
Más recortes
Pero el tema del nuevo paquete de rescate, el segundo tras el concedido en 2010 por valor de 110.000 millones, era portada ayer en todos los diarios griegos, que lo daban por seguro, aunque a costa de más recortes sociales.
«Angustia por 230.000 millones», titulaba el periódico Ta Nea , en referencia a los 130.000 millones de euros del rescate y los 100.000 millones de deuda griega que condonará la banca privada.