Grecia terminó ayer de cumplir con los deberes exigidos por la troika para recibir el nuevo rescate de al menos 130.000 millones, al que el Eurogrupo, si todo marcha como está previsto, debería dar luz verde el lunes.
«Todas las exigencias del Eurogrupo han sido cumplidas. Esperamos que el lunes el Eurogrupo dé luz verde al nuevo préstamo», declaró en rueda de prensa el portavoz del Gobierno, Pantelis Kapsis.
Estas eran especialmente un compromiso firmado por los líderes de los partidos que forman el Gobierno de coalición -Yorgos Papandreu, del socialdemócrata PASOK, y Antonis Samarás, de la conservadora Nueva Democracia (ND)- además del desglose de los 325 millones de euros del paquete de ahorro que faltaba por especificar.
Compromiso político
Las cartas de los líderes políticos fueron enviadas entre el martes y ayer, mientras que el tema de los 325 millones fue «arreglado» ayer.
La troika que forman el FMI, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea exigía que esos 325 millones salieran de recortes de las pensiones, que ya han sufrido dos oleadas de reducciones en los últimos dos años, algo a lo que se oponía especialmente Samarás.
Finalmente se extraerán 75 millones de euros de las jubilaciones, 100 millones serán recortados del abultado presupuesto de Defensa, otros 100 millones se ahorrarán de adelantar de octubre a julio los recortes de gasto público.
Además, se prevé recortar 50 millones de euros más en gastos farmacéuticos (que se unen a los 1.100 pactados dentro del paquete de 3.300 millones).