El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn, celebró ayer la aprobación por parte del Parlamento griego del plan de ajuste exigido por la UE, pero avisó de que el Atenas todavía debe hacer ajustes adicionales por valor de 325 millones de euros antes de mañana si quiere que el segundo rescate se apruebe en el Eurogrupo de ese día.
«Celebro el voto positivo del Parlamento griego sobre el segundo programa para Grecia. Es una expresión de la determinación que prevalece en el país para poner fin a la espiral de finanzas públicas insostenibles y pérdida de competitividad», dijo Rehn.
«Confío en que el resto de condiciones, incluyendo la identificación de medidas concretas por valor de 325 millones de euros, se complete de aquí a la reunión del Eurogrupo, que entonces podrá decidir sobre la aprobación del programa», subrayó.
Mientras, en Atenas, los bomberos se afanaban por apagar los rescoldos de los edificios incendiados el domingo. De los 48 edificios que ardieron total o parcialmente, a primera hora de la tarde de ayer el fuego no se había extinguido del todo al menos en dos de ellos. Uno de ellos es el cine Attikon (1881), situado en un bello edificio neoclásico, que ha quedado completamente calcinado.
En decenas de negocios, principalmente oficinas bancarias, los obreros limpiaban los escombros y reponían los cristales rotos.