La Policía noruega informó este domingo de que el presunto autor del atentado de Oslo y de la posterior la masacre en la isla noruega de Utoya, Anders Behring Breivik, ha «admitido los hechos» y ha confesado que actuó en solitario. Asimismo, precisó que de momento no tiene más sospechosos de la doble matanza, perpetrada el pasado viernes y que causó al menos 93 muertos y 97 heridos.
«Ha admitido los hechos, tanto la bomba como el tiroteo, pero no admite su responsabilidad penal», declaró en rueda de prensa el jefe en funciones de la Policía de Oslo, Sveinung Sponheim.
«Ha dicho que estaba solo, pero la Policía aún debe comprobar todo lo que ha declarado», prosiguió. «Algunos de los testigos del tiroteo en la isla nos han declarado que no están seguros de que hubiera uno o más francotiradores», advirtió Sponheim, quien precisó que la Policía no tiene de momento más sospechosos.
El actual balance de 92 muertos y 97 heridos puede aumentar, porque muchas personas permanecen desaparecidas. Según la Policía, se sigue buscando a los desaparecidos y de momento no se pueden precisar cantidades ni nombres. La Policía tampoco ha podido aclarar si el presunto autor de la matanza está equilibrado psicológicamente.