El Parlamento Europeo (PE) reclamó ayer una investigación internacional auspiciada por las Naciones Unidas para esclarecer los sucesos violentos de El Aaiún y criticó la falta de transparencia de Marruecos sobre la situación en el Sáhara Occidental. En un hecho poco frecuente en los casos de política internacional, todas las fuerzas de la Eurocámara se unieron, incluido el PSOE, para expresar una «firme condena» de la violencia registrada durante el desmantelamiento del campamento saharaui de Gdaim Izik por parte de las autoridades marroquíes.
Los diputados recuerdan en su resolución la muerte a manos de fuerzas marroquíes del joven saharaui Nayem Elgarhi y el fallecimiento en circunstancias sin esclarecer del ciudadano español Babi Hamday Buyema. Además, «lamentan los ataques contra la libertad de prensa y de información» por parte de Marruecos y su negativa a permitir la entrada en el Sáhara a periodistas, observadores y diputados europeos.
Investigación independiente
Así, aunque toma nota de la apertura de una comisión de investigación del Parlamento marroquí, el PE subraya que la ONU «sería la instancia más adecuada para llevar a cabo una investigación independiente». Al mismo tiempo, reclama a las Naciones Unidas un mecanismo de protección de los derechos humanos en el Sáhara y expresa su preocupación por la detención y las supuestas agresiones a defensores de los derechos humanos en la ex colonia española.
El Gobierno marroquí ha lamentado ayer por la tarde la resolución «parcial, precipitada e injusta» que adoptó el Parlamento Europeo y en particular que los eurodiputados hayan escuchado al PP, al que acusó de llevar a cabo una «campaña hostil» contra Marruecos. Marruecos considera que se trata «de una resolución precipitada, parcial, injusta y no objetiva», defendió el ministro de Comunicación marroquí, Jalid Naciri, al término del Consejo de Ministros.