El Gobierno chino apeló ayer al recuerdo de Abraham Lincoln, presidente estadounidense que en el siglo XIX abolió la esclavitud y evitó la secesión de EEUU, como argumento para intentar convencer al presidente Barack Obama de que no se reúna con el Dalai Lama tras su inminente viaje oficial a China.
En la habitual rueda de prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores, el portavoz de turno Qin Gang señaló que Obama, declarado admirador de Lincoln, debe seguir el ejemplo de su antecesor y oponerse al separatismo y la esclavitud.
«Obama sabe que Lincoln abolió la esclavitud. En 1959, China abolió el estado esclavista feudal» en el Tíbet, destacó Qin.
El portavoz aseguró que el Dalai Lama «se involucra en actividades para dividir a la patria» y, volviendo a comparar la situación china con la estadounidense, señaló que el hombre que presidió EEUU entre 1861 y 1865 «mantuvo la unidad territorial» frente al secesionismo sudista.
Qin también apeló a la opinión pública china, asegurando que en muchas encuestas de internet en el país asiático más del 90% de los sondeados se mostraron en contra de una reunión entre Obama y el Dalai Lama.
«La opinión pública de los chinos no debe ser insultada, esperamos que EEUU pueda respetar la soberanía y la integridad territorial de China», destacó Qin, quien aseguró que Obama debe obrar en interés mutuo de los dos países por el bien de las relaciones chino-estadounidenses.
Las declaraciones del portavoz se producen en la misma semana en la que la Casa Blanca confirmó que Obama se reunirá con el líder religioso y político tibetano después de su paso por China, del 15 al 18 de noviembre.