AGENCIAS-RIAD/DUBAI/GINEBRA
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegó ayer a Arabia Saudí, donde fue recibido por el rey Abdulá, en el comienzo de su primera visita a Oriente Próximo, que aprovechará para pronunciar un discurso en El Cairo que espera que mejore la imagen de su país en el mundo islámico.
Tras tomar café árabe en una ceremonia de bienvenida en el aeropuerto de Riad, Obama se dirigió a la finca del rey saudí. «Ésta es mi primera visita a Arabia Saudí, pero he tenido muchas conversaciones con su majestad y me ha impresionado su sabiduría y su gentileza», declaró Obama a los medios de comunicación antes de la reunión. «Confío en que, trabajando juntos, EEUU y Arabia Saudí puedan progresar en una gran cantidad de cuestiones de interés mutuo», añadió.
En cuanto al conflicto entre israelíes y palestinos, Riad quiere que el presidente estadounidense endurezca su postura con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien no se ha pronunciado a favor de que exista un Estado palestino ni ha accedido a frenar la construcción de asentamientos judíos en Cisjordania.
Obama, por su parte, ha expresado su deseo de que Arabia Saudí ofrezca a Israel medidas de construcción de confianza.
Coincidiendo con la presencia de Obama en un país árabe, el líder de la red Al Qaeda, Usama bin Laden, proclamó en un nuevo mensaje grabado que el actual presidente de EEUU y su antecesor, George W. Bush, han «plantado las semillas del odio y la venganza contra EEUU», según informó la cadena de televisión árabe Al Yazira.
Según el líder de Al Qaeda, Obama ha continuado los pasos de su predecesor, por lo que pidió a los estadounidenses que se preparen para sufrir las consecuencias de las políticas de la Casa Blanca.
Por otra parte, el relator especial de Naciones Unidas sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, Philip Alston, instó ayer a Estados Unidos a «observar y publicar el número de víctimas civiles» que causan sus ataques en los países donde tiene misiones militares y le recomendó que informe sobre el estado de todas las investigaciones que está realizando al respecto.
Asimismo, Alston consideró «profundamente preocupante» la dependencia de EEUU de los aviones no pilotados armados con misiles para sus operaciones en países como Pakistán y mencionó también algunas «graves deficiencias» de la justicia marcial estadounidense.