La economía alemana crecerá un 1'5% en 2008 y se contraerá un 2'7% en 2009, según los pronósticos del Instituto de estudios económicos de Kiel, lo que representará «la recesión más grave desde 1974» y el peor dato del producto interior bruto (PIB) germano desde la finalización de la II Guerra Mundial.
De este modo, el instituto alemán ha revisado a la baja sus anteriores previsiones, que auguraban un crecimiento del 1'9% en 2008 y del 0'2% para el próximo año ante el agravamiento de las condiciones de la economía mundial.
En concreto, el IfW augura un especial empeoramiento de las exportaciones como resultado de la recesión que azotará a los países industrializados y al debilitamiento de las economías emergentes.
«Las inversiones se reducirán ante el empeoramiento de las perspectivas de ventas y de las condiciones financieras. Por contra, el consumo privado probablemente crecerá y los ingresos reales disponibles aumentarán pese a la caída de los beneficios y del empleo gracias a los recortes fiscales y el abaratamiento de los precios de la energía», señala el instituto.