Dirigentes de todo el mundo felicitaron ayer a Barack Obama por su victoria en las elecciones presidenciales de Estados Unidos y la mayoría de ellos expresaron la esperanza de que haga realidad el prometido cambio.
En Oriente Medio y Asia Central, dos de las regiones del mundo más conflictivas para Estados Unidos, la elección de Barak Obama ha sido recibida con una mezcla de ilusión y escepticismo.
El ministro iraquí de Asuntos Exteriores, Hoshiar Zibari, saludó la victoria, pero precisó que su país no espera «grandes variaciones» respecto a la política norteamericana en Irak.
Con la demanda de «un nuevo pacto para un nuevo mundo» saludó la elección de Obama la UE, a través del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.
«Necesitamos un nuevo pacto para un nuevo mundo. Espero sinceramente que con el liderazgo del presidente Obama, EE UU aúne fuerzas con Europa para conducirlo. En beneficio de nuestras sociedades, y en beneficio del mundo», destacó Barroso.
En la misma línea se expresaron mandatarios europeos.
El primer ministro británico, Gordon Brown, dijo «compartir» muchos valores con Obama, elogió «sus valores progresistas y su visión de futuro» y añadió la determinación común de demostrar que el Gobierno puede actuar para ayudar a la gente a salir adelante.
Merkel dijo estar «convencida de que, gracias a la estrecha y confiada colaboración entre EE UU y Europa, afrontaremos de forma decidida los nuevos peligros y riesgos, y sabremos aprovechar las múltiples oportunidades», dijo Merkel.
Por su parte, Sarkozy aseguró que la elección de Obama «suscita una inmensa esperanza, la de unos EE UU «abiertos, solidarios y fuertes que muestren de nuevo con sus socios el camino con la fuerza del ejemplo y la adhesión a sus principios» y preserven así la paz y la prosperidad del mundo.
Junto a las felicitaciones, algunos de los principales dirigentes de América Latina pidieron al senador demócrata por Illinois que ponga fin al bloqueo de Cuba.
«Espero también que acabe el bloqueo a Cuba, que no tiene ninguna explicación humana», dijo el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, tras pedir a Obama que «tenga una relación más fuerte con América Latina, con Brasil y con Àfrica» para que los países más pobres puedan desarrollarse.
A levantar el embargo a Cuba también le conminó el presidente de Bolivia, Evo Morales, quien expresó su deseo de que EE UU «retire sus tropas de algunos países».
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, felicitó a Barak Obama y le planteó su convencimiento de que «ha llegado la hora de establecer nuevas relaciones entre nuestros países y con nuestra región, sobre la base de los principios del respeto a la soberanía, la igualdad y la cooperación verdadera».
Desde México, el presidente Felipe Calderón le invitó a visitar el país tras «reiterar el compromiso de su Gobierno para fortalecer y profundizar las relaciones bilaterales.
El primer ministro japonés, Taro Aso, fue uno de los primeros en enunciar su esperanza de «trabajar juntos» para el bien de la alianza entre ambos países.
En China, el presidente chino, Hu Jintao, resaltó la importancia de mantener el progreso en las relaciones bilaterales.