EFE-SAINT PAUL (EE UU)
La Convención Republicana, que nombrará a John McCain candidato del partido a la Casa Blanca, comienza hoy en St. Paul con el objetivo de ilusionar a sus seguidores pese a los cambios forzados por el huracán Gustav.
El propio McCain, que ha cambiado su programa para estar en Misisipi, uno de los estados amenazados por el huracán, afirmó que actuarán «como estadounidenses primero y republicanos después» y pidió a los organizadores de la convención «cambios» para responder a la situación en el golfo de México.
La alteración más significativa hasta el momento es la ausencia del presidente George W. Bush y del vicepresidente Dick Cheney, que no acudirán ante la gravedad de la situación en el golfo.
En su lugar, Bush tiene previsto desplazarse a Texas, donde supervisará la coordinación de las tareas de emergencia. Desde ese estado se dirigirá a los delegados en la convención vía satélite.
Una de las cosas que los republicanos quieren evitar a toda costa es la asociación con el desastre que supuso el huracán Katrina, que hace tres años devastó Nueva Orleans y la misma zona que ahora amenaza