El general Raúl Castro Ruz, de 76 años, fue elegido ayer presidente de Cuba y sucede a su hermano Fidel, de 81, que estuvo en el poder 49 años y 55 días, casi la mitad de la vida independiente de la isla. El anuncio oficial lo hizo el reelegido presidente del Parlamento, Ricardo Alarcón, entre aplausos.
En sus primeras palabras, Raúl Castro afirmó que el comandante en jefe de la revolución sigue siendo Fidel, a pesar de su salud, y que solo el Partido Comunista es digno heredero suyo, como «fuerza dirigente superior».
Presidente interino durante los últimos 19 meses, el general encabezó la lista única de candidatos presentada a la Asamblea Nacional para designar por cinco años al nuevo presidente y demás dignatarios del Consejo de Estado.
Serán vicepresidentes del Consejo de Estado Carlos Lage, Juan Almeida, Esteban Lazo, Abelardo Colomé Ibarra y Julio Casas Regueiro, todos ya dirigentes conocidos del régimen, y el secretario será José Miyar Barruecos.
Es la primera transición en el liderazgo cubano desde que fue derrocado el dictador Fulgencio Batista el 1 de enero de 1959 y el mensaje es diáfano: todo sigue igual. Alarcón, de 71 años, renovó también ayer su mandato para un nuevo periodo de cinco años. Fue reelegido igualmente el vicepresidente del parlamento, Jaime Crombet, de 66 años, que ha tenido esa función en las tres anteriores legislaturas.