OTR/PRESS-YAMENA/MADRID
Los rebeldes de la República del Chad lanzaron ayer una rápida y eficaz ofensiva sobre la capital del país, Yamena, que logró alcanzar al centro neurálgico del Gobierno, el Palacio Presidencial, donde las fuerzas leales al Ejecutivo del presidente Idriss Deby tratan de evitar el asalto.
Mientras las naciones europeas y Estados Unidos ultiman la evacuación de sus ciudadanos del país, la ONG Intermón Oxfam informó de que al menos once españoles están atrapados en Chad, debido a que los intensos combates han dificultado su traslado en vehículos blindados franceses.
La ofensiva del Frente Popular del Chad sorprendió a los ciudadanos de Yamena igual a que las fuerzas del Gobierno por su rapidez y contundencia. Aunque las refriegas entre leales y opositores se han sucedido en las últimas semanas en distintos puntos del país, no se esperaba que la guerrilla logrará superar al Ejército y llegar al centro de la capital en pocas horas, pues los sonidos del combate podían oírse por la mañana a 30 kilómetros de la ciudad. A última hora de la tarde, los milicianos del FP parecían moverse con total libertad por Yamena.
Mientras el paradero del presidente era completamente desconocido, la radio y la televisión estatal suspendían sus emisiones, según informaciones de 'Al-Jazeera'. Los efectivos del Ejército se apostaron en el Palacio Presidencial, el Ministerio de Defensa y la radio estatal, para defender los edificios de los casi 300 vehículos rebeldes que atacaron la capital. Los propios milicianos aseguraron que Deby, en el poder por un golpe de Estado desde 1990 y reelegido en tres ocasiones en las urnas, puede estar dentro del Palacio Presidencial.
«Controlamos la situación, controlamos la ciudad, aunque hay ciertas bolsas de resistencia», aseguró uno de los milicianos, que garantizó que si el presidente de Chad quiere rendirse, la guerrilla «le llevará a la Justicia y garantizará su seguridad».