OTR/PRESS-MADRID
Más de 150 soldados paquistaníes siguen retenidos por segundo día cerca de la frontera con Afganistán en medio de divergencias entre militantes islámicos, que quieren mantenerlos como rehenes, y líderes tribales que defienden su liberación.
Los militares, que viajaban en un convoy de dieciséis camiones, fueron interceptados este jueves en la montañosa región de Waziristán del Sur por un grupo de islamistas que los tomó como rehenes, dijo a Efe una fuente de la inteligencia.
En un principio, el portavoz del Ejército, Waheed Arzad, negó que los soldados hubieran sido secuestrados y aseguró que no habían podido llegar a su destino a causa del mal tiempo, pero hoy matizó que no pueden dejar la zona por «una disputa» entre tribus locales y los militantes.
Evaluando la situación
Arzad agregó que la cúpula del Ejército está «evaluando» la situación y no ha planeado lanzar ninguna operación en la zona, porque quiere evitar el uso de la fuerza. Según el portavoz castrense, el mal tiempo que obligó a los militares a levantar un campamento en el área continúa, pero aseguró las tropas abandonarán la zona una vez que los grupos tribales lleguen a un acuerdo.
Una fuente de los servicios secretos en Islamabad dijo a Efe que los militantes islámicos, respaldados por grupos talibanes, quieren mantener a los soldados como rehenes.