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Cuatro coches bomba causan al menos 175 muertos en Mosul, al norte de Irak

Secuestran a cinco altos funcionarios del Ministerio de Petróleo iraquí

Un SH-60 Seahawk, despegando. Cinco soldados de EE UU perdían la vida ayer al estrellarse su helicóptero. Foto: EFE

AGENCIAS-BAGDAD
Cinco altos funcionarios del Ministerio de Petróleo iraquí fueron secuestrados ayer en uno de los edificios del Ministerio ubicado en el este de Bagdad por más de 50 hombres armados, ataviados con los uniformes oficiales de los servicios de seguridad iraquíes y a bord de 17 vehículos oficiales, según informaron el portavoz del Ministerio y la Policía.

Entre los secuestrados se encuentra Abdel Jabar al Wagaauno, uno de los máximos asistentes del ministro de Petróleo, Hussain al Shahristani, según explicó el portavoz del Ministerio, Assem Jihad, que precisó que los vehículos empleados para ejecutar el secuestro podrían ser vehículos oficiales militares. Según Jihad, los secuestradores pertenecen a un «grupo criminal». Por su parte, una fuente del Ministerio de Interior iraquí, que apeló al anonimato, aseguró que un alto cargo de la Organización Petrolífera de Marketing y tres directores generales del organismo fueron secuestrados también en la operación. Asimismo, informó de que cinco agentes de seguridad resultaron heridos durante la redada a la sede del organismo en la calle Palestina, en el este de Bagdad.

De la misma forma, al menos treinta personas murieron ayer y 70 resultaron heridas por la explosión de cuatro vehículos cargados de explosivos en varias poblaciones al oeste de Mosul, donde la mayoría de la población pertenece a la secta yazidí, según fuentes policiales.

Las fuentes indicaron que los cuatro vehículos estaban conducidos por suicidas y que uno de ellos era un camión de gran tonelaje.
El atentado más sangriento, que acabó con la vida de 20 personas y dejó a más de 30 heridas, tuvo lugar en la localidad de Al Beag, a 120 kilómetros al suroeste de Mosul, situado a 400 kilómetros al norte de Bagdad.

Otras diez personas murieron en una segunda explosión en el complejo residencial de «Al Yazira», cerca de la ciudad de Sinyar, a 70 kilómetros al oeste de Mosul.

En este atentado, al menos cuarenta personas sufrieron heridas de diversa consideración, según las fuentes.
Las fuentes agregaron que otro de los vehículos explotó junto a una sede del Partido Democrático del Kurdistán, dirigido por el presidente de la región autónoma del Kurdistán iraquí, Masud Barzani.

Los agentes dijeron que debido a la hora y la dificultad de llegar a los lugares donde han ocurrido los ataques se está ralentizando la operación de rescate y las informaciones aún son confusas.

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