EFE-DAMASCO
La polémica reunión entre la presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, y el presidente sirio, Bachar el Asad, acabó ayer con palabras alentadoras respecto a una posible reapertura del diálogo entre Siria e Israel.
Pelosi, que se reunió con Asad pese a la oposición manifiesta de Bush, transmitió al líder sirio una oferta de diálogo de parte del primer ministro israelí, Ehud Olmert.
En ésta, según la propia Pelosi, Olmert informaba a Asad del interés de Israel por reanudar las conversaciones de paz entre ambos países, estancadas desde enero de 2000.
A ese mensaje, que no fue confirmado por el Gobierno sirio, respondió Asad con el «deseo» que tiene su país de alcanzar la paz con Israel y en el conjunto de la región. «Esto demuestra que la opción estratégica de Siria es un trabajo creíble por la paz», aseguró Asad a Pelosi, según un portavoz.
Tanto Siria como Israel repiten una y otra vez que están dispuestos a firmar la paz, pero para Siria toda negociación debe pasar primero por la retirada israelí de los Altos del Golán, que le fueron ocupados en 1967, mientras que Israel prefiere unas negociaciones sin condiciones previas.
Respecto al deshielo diplomático con EEUU, Asad dijo a Pelosi que «el diálogo directo puede llevar a explicarnos mutuamente muchas realidades y a tratar de muchos asuntos en interés de nuestros países y de la región».