EFE-RABAT
Casi cuatro años después de los atentados de Casablanca, el espectro del terrorismo vuelve a planear sobre Marruecos después de que un suicida se inmolara en un cibercafé del barrio de Sidi Mumen de la capital económica marroquí. En el atentado resultó muerto el terrorista, mientras que un segundo suicida y tres personas que se hallaban en el interior del establecimiento resultaron heridas de diversa gravedad.
La detención de este segundo terrorista, que al parecer abandonó en el local la carga explosiva que también llevaba adosada a su cuerpo antes de intentar emprender la huida, será de vital importancia para las investigaciones policiales respecto a los autores y los objetivos del atentado. El segundo terrorista suicida fue detenido poco después de emprender la huida y fue ingresado en un hospital de Casablanca puesto que resultó herido en la cara y en el cuello como consecuencia de la explosión.
El detenido ha sido intervenido quirúrgicamente y la policía espera que se recupere para proceder a su interrogatorio. Parece poco probable que el objetivo de los terroristas fuera el cibercafé, puesto que éste se halla en un barrio marginal de la periferia de Casablanca en el que abundan las chabolas y que en el momento del atentado el establecimiento estaba casi vacío.