JOAQUÍN RÀBAGO-LONDRES
La secretaria estadounidense de Estado, Condoleezza Rice, defendió
ayer en Blackburn la invasión de Irak argumentando que «el parto de
la democracia es a veces difícil». «No fue un error derrocar a
Sadam Husein. No fue un error desencadenar las fuerzas de la
democracia en Oriente Medio», dijo Rice en declaraciones a la
«BBC».
En todos los actos previstos tanto en Liverpool como en Blackburn, localidad por la que es diputado su anfitrión, el ministro de Asuntos Exteriores británico, Jack Straw, Rice ha tenido que soportar gritos, pitadas y abucheos de grupos pacifistas, que la perseguían a todas partes. El viernes, durante su presencia en una escuela de Blackburn, los manifestantes le preguntaron, tras llamarla «terrorista», a cuántos iraquíes había matado sólo ese día.
Una proyectada visita a la mezquita local tuvo que anularse ante las protestas de grupos musulmanes críticos con la guerra de Irak, con el trato dado por Estados Unidos a los detenidos en la base de Guantánamo (Cuba) y con su política pro-israelí en el conflicto palestino. En un concierto celebrado el viernes en honor de Rice en el Instituto de Artes Escénicas de Liverpool y que fue boicoteado por algunos músicos, la cantante Jennifer John presentó la canción «Imagine», de John Lennon, recordando a los presentes que fuera del edificio había gente manifestándose pacíficamente.