CLARA PINAR-SÀHARA OCCIDENTAL
La autoproclamada República Àrabe Saharaui Democrática (RASD)
celebró ayer el 30 aniversario de su proclamación en Tifariti,
territorio del Sáhara Occidental ganado por los saharauis a
Marruecos, con un desfile militar al término del cual el presidente
de la república, Mohamed Abdelaziz, rechazó cualquier plan de
autonomía para el territorio e insistió en la independencia como
única solución posible del conflicto que enfrenta al Frente
Polisario y a Marruecos desde 1975.
Delegaciones de alrededor de 40 países que reconocen oficialmente a la RASD presenciaron desde la tribuna de invitados el discurso de Abdelaziz, que hizo un repaso histórico del conflicto empezando por la «vergonzosa retirada de la administración española» en 1976, la creación de la RASD y la lucha que desde entonces ha librado el pueblo saharaui por su reconocimiento como lo que «es hoy día, una realidad nacional, regional e internacional, consciente de la necesidad de la implementación de la paz en base al respeto de las normas y principios de la legalidad internacional».
«Somos una nación de paz y no solicitamos sino que se conceda a nuestro pueblo la legítima oportunidad en la votación y en la elección», dijo el líder saharaui en alusión a la celebración de un referéndum para que el pueblo saharaui decidiera sobre su independencia que preveía el plan de paz denominado Plan Baker.