EFE-COPENHAGUE
La crisis diplomática creada tras la publicación de las viñetas de
Mahoma en el diario «Jyllands-Posten» se agudizó ayer tras la
decisión del Gobierno de Dinamarca de cerrar temporalmente sus
embajadas en Siria, Indonesia e Irán.
Dinamarca considera que las autoridades sirias han reducido «a un nivel inaceptablemente bajo» su protección sobre la embajada y el personal diplomático en Damasco, que hace una semana fue incendiada por miles de manifestantes enfurecidos, informó ayer el Ministerio de Asuntos Exteriores.
En los casos de las representaciones diplomáticas en Teherán y Yakarta, que también han sufrido ataques, su cierre obedece a informaciones «creíbles» sobre amenazas concretas contra el embajador, en el primer caso, y su personal, en el segundo, si bien las autoridades danesas no entraron en detalles sobre el tema.
La decisión del Gobierno danés llega cuando los incidentes en los países islámicos contra los intereses daneses parecían haber remitido en los últimos días.
El ministerio de Asuntos Exteriores desaconsejó también los viajes a Irán, Siria e Indonesia y pidió a sus nacionales que abandonen estos países. En el caso de Indonesia, Exteriores ha recibido «informaciones concretas» que indican que un grupo extremista pretende mostrar su protesta contra las caricaturas a los turistas daneses en el este de Java y, posiblemente, en otros sitios del país.