El primer caso sospechoso de gripe aviar de la Unión Europea (UE) resultó ser una falsa alarma, después de que los análisis efectuados a un individuo hospitalizado en Bruselas hayan descartado «al cien por cien» que padezca esta enfermedad y haber desatado todas las alarmas sanitarias en Europa.
La posibilidad de que el enfermo fuese portador de la temida cepa H5 de la gripe aviar mantuvo varias horas en vilo a las autoridades sanitarias belgas, que finalmente confirmaron que sólo padecía una gripe de tipo humano, habitual en esta época del año. El ministro federal belga de Salud Pública, Rudy Demotte, acompañado de los médicos que atendieron al paciente, expresó su «satisfacción» por los resultados de los análisis en una rueda de prensa en el Hospital Universitario Saint-Pierre, donde el enfermo está ingresado en una unidad de aislamiento.
El individuo en cuestión es un cámara ruso que viajó recientemente a la región turca de Van, afectada por la gripe aviar, para filmar un reportaje sobre el alcance y consecuencias de la enfermedad en la zona. Durante su estancia en el país, el cámara, residente en Bruselas, «visitó granjas y un hospital», pero aseguró no haber estado en contacto con personas portadoras del virus, ni con sospechosas de serlo, explicó el comisionado interministerial para la gripe aviar, Piet Vanthmesche. Según confirmó el doctor y virólogo René Snacken, los análisis realizados en el Instituto Científico de Salud Pública descartaron «al cien por cien» que el enfermo fuera portador de la cepa H5. «Por dos veces hemos descartado que se trate de la cepa H5», la más virulenta, «y dos veces hemos identificado la cepa H3, que corresponde a una gripe de temporada», dijo el doctor, quien subrayó que mañana se confirmará totalmente que el enfermo es portador de la cepa H3 y no de otra, pero en cualquier caso de tipo humano.