La canciller alemana Angela Merkel anunció ayer que pedirá el próximo viernes al presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, que cierre el centro de detención de la Base Naval de Guantánamo (Cuba) tras las denuncias de casos de tortura, en la que será su primera visita a EE UU desde que accedió al cargo.
Merkel quiso quitar un poco de hierro al asunto, después de que el semanario «Der Spiegel» anunciara que en su próximo número publicaría una entrevista con la nueva canciller de Alemania, en la que ésta asegura que «exigirá» a Bush el cierre de Guantánamo.
«Una institución como Guantánamo no puede ni debe existir así a la larga. Se deben encontrar medios y formas para dar otro trato a los prisioneros», dijo Merkel a este semanario, en referencia a las múltiples denuncias por torturas en Guantánamo.
La canciller rebajó, sin embargo, ayer un poco el tono cuando fue preguntada sobre la cuestión en una rueda de prensa tras una reunión de la Ejecutiva de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), en Maguncia.Curiosamente Merkel se reunió en febrero de 2005 con Bush en esta ciudad alemana, donde expresó su deseo de mejorar las relaciones con el socio transatlántico si salía elegida canciller.
Merkel, que se convirtió el pasado 22 de noviembre en la primera mujer canciller de Alemania, dijo que no se trata de «formular exigencias» ante Washington, sino simplemente de «un intercambio de opiniones» en el que explicará a Bush su «opinión y posición» sobre Guantánamo.