EFE-HAMPTON COURT
El presidente de turno de la Unión Europea, Tony Blair, logró ayer
su objetivo de esquivar el conflictivo tema del presupuesto
comunitario, aplazado hasta diciembre, para centrarse en las
prioridades de Europa ante los desafíos crecientes de la
globalización. En la optimista interpretación del primer ministro
británico y anfitrión de la cumbre de ayer de la Unión Europea, sus
participantes coincidieron en «la dirección económica y social» que
debe tomar Europa para afrontar esos retos y se comprometieron a
hacer todo lo posible para acordar el próximo presupuesto antes de
final de año.
Resumiendo el espíritu de la reunión, celebrada en el palacio de Hampton Court, al sur de Londres, Tony Blair señaló que todos ellos estaban de acuerdo en la existencia de varias áreas en las que la UE puede y debe trabajar «más estrechamente». Se refirió en concreto a la necesidad de preparar a la economía europea para la competencia que presentan los gigantes emergentes como China o la India, aumentando las inversiones en la economía del conocimiento, reforma de las universidades, investigación y desarrollo e innovación tecnológica.
Los participantes en la cumbre coincidieron por otro lado, según Blair, en la necesidad de elaborar un plan común contra el terrorismo, que incluya una mayor cooperación judicial y policial. El anfitrión anunció que algunas de las iniciativas discutidas ayer se recogerán en un borrador que se presentará en el Consejo Europeo de diciembre, el último bajo presidencia británica, con el objetivo de llegar a conclusiones en la reunión que presidirá Austria en marzo del próximo año.