OTR/PRESS-SHARM EL SHEIK
Tres coches bombas explotaron en la madrugada del sábado en una
ciudad turística del norte de Egipto, causando la muerte de al
menos 90 personas y 150 heridos. El peor atentado desde 1997 Entre
los afectados por la masacre, cuya autoría no ha sido reivindicada
aunque se atribuye a grupos islamistas radicales, se encuentran
cinco españoles, tres de los cuales, dos hombres y una mujer, se
encontraban de visita turística en Sharm el Sheik, en la zona del
Sinaí egipcio. La primera explosión tuvo como blanco un mercado, la
segunda contra un hotel y la tercera en una zona de hoteles de
lujo. El efecto de los coches bomba empleados por los terroristas
pudo sentirse a kilómetros de distancia, causando la muerte de 90
personas y 150 heridos, según datos médicos que no descartan que el
número de fallecidos pueda aumentar a medida que pasan las horas.
Entre las víctimas mortales, se encuentran al menos ocho ciudadanos
extranjeros: dos británicos, dos alemanes y un italiano.
Tres de los cinco heridos españoles son dos hombres y una mujer que trabajan en una planta de gas del Norte de Egipto, propiedad de la empresa Segas, participada por el grupo Unión Fenosa, y se encontraban, en el momento de los terribles atentados, pasando el fin de semana en Sharm el Sheij. Uno de ellos fue trasladado a un hospital de El Cairo en helicóptero después de las explosiones, aunque fue dado de alta poco después con un fractura en un brazo y diferentes golpes en distintas partes del cuerpo. Junto a él, fueron dados de alta otros dos españoles.
La Embajada informó que los otros dos trabajadores de momento no serán trasladados. Uno de ellos, el hombre, recibió golpes en la cabeza y sufrió quemaduras, mientras que la mujer padece una hemorragia interna y tuvo que ser intervenida quirúrgicamente. El portavoz de la Embajada informó de que la situación de los cinco españoles no reviste peligro.