MARTA ALTUNA-LONDRES
La Policía Metropolitana de Londres confirmó ayer que los atentados
perpetrados hace una semana fueron obra de cuatro terroristas
suicidas, poco antes el Gobierno británico reconocía que la autoría
del 7-J era de la organización terrorista AL Qaeda, liderada por
Osama Bin Laden. Mientras, el balance oficial de víctimas en las
explosiones asciende ya a 53 y prosiguen las investigaciones de las
fuerzas de seguridad para obtener más datos y efectuar posibles
nuevas detenciones.
La policía británica evacuó esta tarde la zona de Beeston, en Leeds (norte de Inglaterra), acordonó los alrededores y efectuó una explosión controlada.
El director de la policía londinense, Ian Blair, dejó claro ayer lo que era un secreto a voces. Las cuatro explosiones del pasado jueves contra la red de transporte de la capital fueron obra de kamikazes. «En una democracia liberal no se necesita ser un atacante suicida. Ellos escogieron serlo. Creemos (saber) quiénes eran las cuatro personas que llevaban las bombas... y creemos que están muertas. Tenemos toda la certeza posible de que las cuatro personas murieron y eran las cuatro personas que llevaban las bombas», aseguró.
Por otra parte, la policía británica evacuó ayer la zona de Beeston, en Leeds, en el norte de Inglaterra, como parte de la investigación que esta teniendo lugar en relación a los atentados. La policía realizó una explosión controlada en este área después de haber acordonado la zona y evacuado a los residentes. Los servicios de seguridad recomendaron a los vecinos llevar suficiente ropa para los tres próximos días. Asimismo, la policía registró una casa a 16 kilómetros de Luton, al norte de Londres, pero no se realizó ninguna detención.