El Senado italiano ha aprobado una ley que permite el uso de armas en propiedades privadas en legítima defensa y que, a la espera de su ratificación en la Cámara, ha suscitado una gran controversia en Italia.
La norma aprobada en la Cámara Alta modifica el artículo 52 del Código Penal italiano, que establece que la respuesta de una persona agredida debe ser «proporcional» al ataque.
Si el texto obtiene la luz verde definitiva de la Cámara de Diputados, los italianos podrán responder con disparos a quien irrumpa en propiedades privadas, desde viviendas hasta jardines o locales comerciales.
La ley fue propuesta por la coalición conservadora en el Gobierno y deroga el principio de utilizar una defensa proporcionada al ataque en los casos en que el agredido deba «defender su propia integridad o la de las personas que estén cerca».
También permite abrir fuego en caso de robo o daños a bienes materiales, un punto que ha recibido duras críticas de la oposición del centroizquierda, que considera que fomentará la violencia en el país.