FRANCE PRESS-BAGDAD
Irak vivió una nueva jornada de violencia con decenas de muertos,
23 de ellos en la capital, Bagdad, donde un terrorista se suicidó
en un restaurante de comida tipo kebab en hora de máxima
asistencia. Mientras tanto, las tropas norteamericanas y el nuevo
Ejército iraquí continuaban la «operación Lanza» en la ciudad
iraquí de Karabila, fronteriza con Siria.
Un terrorista suicida que vestía un chaleco cargado de explosivos se suicidó dentro de un popular restaurante de Bagdad, matando por lo menos a 16 personas y causando heridos a otras 25, informaron las autoridades.
El ataque tuvo lugar a la hora del almuerzo, en el restaurante Zarzour, uno de los más populares de la capital iraquí, expresó el teniente policial Thaer Mahmoud, quien detalló que los heridos fueron trasladados al Hospital Yarmuk de la capital.
El restaurante, que es frecuentado por policías y soldados iraquíes, se vio sorprendido por esta gran explosión, que sucedió a unos 400 metros del acceso principal a la Zona Verde, donde están las oficinas del Gobierno iraquí y las embajadas de Estados Unidos y Gran Bretaña. Las únicas partes del cadáver del terrorista suicida encontradas fueron su cabeza, un brazo y una pierna.Además nuevos atentados terroristas se registraron en varios puntos del país. Así, un nuevo ataque de los insurgentes acabó con la vida de por lo menos a 17 personas en distintos lugares del país, ignorando dos ofensivas conjuntas de las fuerzas iraquíes y estadounidenses que comenzaron esta semana y buscan destruir las redes de los milicianos.