Dos pequeños artefactos explotaron en la madrugada de ayer junto al edificio que alberga el consulado británico en Nueva York, incidente que coincidió con el inicio de la jornada electoral en el Reino Unido.
La explosión ocurrió a las 03.35 horas del jueves (07.35 GMT) en la acera del edificio que acoge el consulado y otras oficinas, situado en la tercera avenida, entre las calles 51 y 52, en Nueva York, y pudo ser escuchada en una comisaría cercana. Las detonaciones no causaron daños personales, aunque sí algunos desperfectos materiales y roturas de cristales en los alrededores. Los dos artefactos fueron elaborados de manera casera con dos granadas de juguete de distinto tamaño, que fueron rellenadas con pólvora y conectadas entre sí, sin temporizador, según fuentes policiales.
Tras las primeras indagaciones, el alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg, y el jefe de la Policía, Raymond Kelly, dijeron en una rueda de prensa que por el momento las autoridades desconocen la autoría o la motivación del atentado. Kelly indicó, además, que no podía asegurar a ciencia cierta que el objetivo de las explosiones fuera el consulado británico, dado que el edificio alberga también varias empresas estadounidenses y extranjeras. El hecho de que el incidente coincidía con la jornada electoral en el Reino Unido, en la que Blair busca su tercer mandato, ha hecho surgir algunas conjeturas.