Al menos ocho iraquíes murieron y más de veinte resultaron heridos por la explosión de dos bombas en una carretera de la ciudad de Basora, a unos 500 kilómetros al sur de Bagdad. El atentado ocurrió en una carretera entre los barrios Al Husein y Al Zubeir, en el sureste de Basora, y tenía como blanco un convoy de la policía iraquí. Fuentes del Hospital Al Sadr, en Basora, confirmaron que este centro recibió ocho cadáveres y más de 20 heridos.
Por otra parte la policía iraquí ha hallado los cadáveres de unos cincuenta hombres supuestamente asesinados por los insurgentes en una localidad situada al sur de Bagdad, informó el canal de televisión Al Arabiya. Esta noticia no ha sido confirmada hasta el momento y se desconoce si el hallazgo de estos cadáveres tiene alguna relación con las informaciones que circularon en los últimos días sobre la captura de decenas de chiíes por radicales armados suníes en Al Madaen.