El presidente de Irán, Mohamed Jatamí, reivindicó ayer el derecho de su país a disponer de tecnología nuclear y a no someterse a la tutela de las naciones poderosas del mundo. «Tenemos que buscar nuestro camino en este mundo. Tenemos que ser fuertes, no para golpear a otros sino para defendernos y rechazar a los que quieren dominarnos», dijo Jatamí en Caracas en el acto de inauguración de una ensambladora de tractores de capital mixto.
El presidente de Irán, quien concluyó anoche una visita de dos días a Venezuela, explicó que los países desarrollados quieren imponer un esquema en el que se reservan el papel de guías del mundo y dejan para las demás naciones el de ejecutoras de sus mandatos, los cuales reflejan sus intereses económicos y políticos.
Sostuvo que el futuro se basa en la democracia, en la que los pueblos deciden sin injerencias extranjeras, y en su capacitación humana y tecnológica, una combinación que «es más potente que mil bombas». Estados Unidos y la Unión Europea tratan de convencer en actualidad a Irán para que abandone su programa nuclear, al que consideran destinado a fines militares.
Para ello ofrecieron el viernes a Teherán una serie de modestos incentivos económicos y le amenazaron con sanciones si fracasan las negociaciones en curso. La decisión de Irán de contar con tecnología nuclear fue respaldada el viernes por el Gobierno venezolano y ratificada ayer, en el mismo acto, por el presidente venezolano, Hugo Chávez, que calificó el discurso de Jatamí de «democrático, antiimperialista, ético y faro para el mundo».