EFE-BAGDAD/LONDRES
La periodista iraquí Raida Al Wazam, quien fue secuestrada la
semana pasada cerca de la ciudad de Mosul, fue hallada muerta con
un disparo en la cabeza, informó a la prensa su marido, Salim
Saad-Allah. El cadáver de Raida Al Wazan fue hallado el viernes, no
muy lejos de lugar en el que tuvo lugar la captura, explicó su
esposo sin facilitar otros detalles.
La conocida periodista, locutora de la televisión local de la provincia de Niniveh, cuya capital es Mosul, fue asaltada el pasado 20 de febrero por un grupo de hombres armados cuando transitaba en su vehículo junta a su hija. Pocos días antes, la sede de la televisión para la que trabajaba fue objeto de un ataque con morteros del que después de responsabilizó un grupo vinculado con el islamista radical jordano Abu Musab Al Zarqaui, considerado la principal amenaza terrorista de Irak.
Sin embargo, ningún grupo ha asumido la autoría del secuestro y asesinato de Wazam, que había recibido, al igual que su compañeros, repetidas amenazas de muerte. Esta misma semana, la cadena emitió varias entrevistas con insurgentes de diversos países que habían sido capturados en Mosul.
Mientras, el Ejército de EEUU prosiguió con su ofensiva en la convulsa provincia de Al-Anbar, corazón de la insurgencia en Irak, país donde ayer murieron diez personas en una nueva oleada de violencia. Unidades de los «marines» asaltaron la conflictiva ciudad de Hadiza, a unos 250 kilómetros al oeste de Bagdad, donde encontraron menos resistencia de la esperada.
Tanques y unidades a pie irrumpieron en la citada población, donde libraron varias escaramuzas con pequeños grupos de insurgentes armados con fusiles y otro armamento ligero. Las fuentes militares no proporcionaron, sin embargo, cifras de posibles bajas o si se practicaron detenciones durante esta incursión.