Rice, que llegó ayer a la región, se refería a la polémica registrada estas últimas semanas sobre la decisión de Israel, tomada el verano pasado, de confiscar las propiedades en Jerusalén Oriental de los palestinos residentes fuera de la Ciudad Santa.
Además, Rice instó a Israel a aplicar sin retrasos el plan de retirada de la franja de Gaza y de cuatro asentamientos en el norte de Cisjordania, cuya ejecución está prevista para este julio.
La jefa de la diplomacia estadounidense destacó en conversación con su homólogo israelí, Silvan Shalom, que el presidente palestino, Mahmud Abás (Abú Mazen) ha sido elegido democráticamente y que necesita toda la ayuda posible para construir una base firme para su liderazgo.
Asimismo, animó a Israel a continuar con «la toma de decisiones difíciles a fin de promover la paz... y el surgimiento de un estado democrático palestino».
En cuanto a las relaciones entre EE UU e Israel Rices, afirmó que son solidas «porque no sólo compartimos intereses sino también valores» y agregó que el objetivo de su visita es «progresar en el camino hacia la paz y superar la maldición del terrorismo».
No obstante, Rice subrayó que «este es un periodo de optimismo porque cambios fundamentales están en camino en todo Oriente Próximo».
Rice llegó ayer tarde a Israel, en una visita a la región de 48 horas, para entrevistarse con los dirigentes del Gobierno israelí, entre ellos el primer ministro, Ariel Sharón, y hoy con los de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), entre ellos Abú Mazen.