Quince partidos políticos iraquíes rubricaron ayer un documento en el que piden al Gobierno interino del primer ministro Iyad Alaui que retrase las elecciones, previstas para el 30 de enero, informó uno de los firmantes.
Mosen Abdel Hamid, vicesecretario general del Partido islámico iraquí, explicó que el escrito solicita a Alaui y al Consejo Electoral iraquí que se posponga en un plazo de seis meses la celebración de los comicios, pues «no deben celebrase en medio del caos de seguridad que reina en el país».
Señaló, además, que «el objetivo es no marginar del proceso a los árabes suníes, en especial a los de las provincias de Al Anbar (Ramadi), Diyala (Baquba), Ninive (Mosul) y Saleh Edin (Tikrit), donde la situación es muy tensa».
Agregó que entre los firmantes figuran, entre otros, la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK) de Yalal Talabani, el Movimiento Democrático Independiente del ex candidato a la presidencia Adnan Pachachi, y la Coalición Patriótica, que es una formación integrada por más de 50 partidos y agrupaciones políticas. Indicó que a la rúbrica del documento «asistió un representante del partido de Alaui, pero decidió no firmarlo», sin precisar más detalles.
Mientras, la violencia no cesa en el país. Cuatro trabajadores de una compañía de seguridad británica murieron y otros quince resultaron heridos en un ataque de insurgentes contra el recinto de la «Zona Verde», en el oeste de Bagdad, informó hoy la empresa en un comunicado. En la nota indica que entre los heridos «no hay ciudadanos británicos», pero no precisa su nacionalidad ni la de los fallecidos, así como la fecha del incidente. Grupos de insurgentes continúan activos en Faluya, donde dos marines de Estados Unidos murieron y otros tres resultaron heridos en un ataque de los rebeldes.