El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, felicitó ayer a George W. Bush por su victoria en las elecciones de EE UU y dijo esperar que las relaciones entre España, la UE y EE UU se fortifiquen. El presidente del PP, Mariano Rajoy, pidió al Ejecutivo que se esfuerce por tener unas relaciones «razonables» con la administración Bush, deje de dar patadas en la espinilla a la máxima potencia mundial y empiece a defender los intereses generales de su país. CiU consideró que ahora el Gobierno deberá «retomar la agenda atlántica aprobada en 1995» para reforzar y ampliar la OTAN. Mientras que desde el PNV aconsejan al Gobierno «replantearse la política bilateral» con EE UU.
Zapatero no tuvo ningún inconveniente en felicitar públicamente al más que previsible ganador de las presidenciales estadounidenses y aprovechó para mostrar la voluntad de su Gabinete de que en el nuevo periodo que se abre tras dichos comicios se establezca una relación de cooperación «eficaz y constructiva», desde el respeto a las «ideas y principios de cada uno y lo que representa cada país».
Zapatero destacó la necesidad de trabajar para que las relaciones entre EE UU y la UE sean «más fuertes y más sólidas», entre otras cosas pensando en los «retos de enorme trascendencia» que existen en el orden internacional que hay que resolver. En su opinión, las relaciones de España con EE UU se han venido cumpliendo «adecuadamente», sin olvidar que se han mantenido distintas posiciones en algunos temas de gran calado como el del conflicto en Irak.
La cúpula del Ejecutivo también trasladó el mismo mensaje. Así, el ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, afirmó que el Gobierno reforzará la relación con EE UU «sea quien sea el inquilino de la Casa Blanca»; mientras que el ministro de Defensa, José Bono, destacó que la alianza y la amistad con EE UU es «una prioridad» del Ejecutivo.