EFE/FRANCE PRESS-BAGDAD
Al menos 27 personas fallecieron ayer y unas treinta resultaron
heridas en una de las jornadas más violentas en Irak. Tres días
antes de las elecciones presidenciales estadounidenses, ocho
marines murieron en una operación de seguridad en la provincia de
Al Anbar. Al menos siete personas murieron y otras seis resultaron
heridas en la explosión de un coche bomba frente al edificio que
alberga las oficinas de la televisión por satélite «Al Arabiya» en
Bagdad.
Por su parte, aviones de guerra apoyados por el fuego de la artillería norteamericana bombardearon ayer un barrio del este de la ciudad rebelde de Faluya, donde se desataron cruentos combates entre los insurgentes suníes y las tropas estadounidenses. Además, en Ramadi, capital de conflictiva provincia de Al Anbar, soldados del Ejército de EEUU se enfrentaron a los rebeldes de la ciudad en los alrededores de la Gran Mezquita de Al Daula Al Kabir, informaron cadenas árabes sin dar más detalles.
Pero según un comunicado del mando militar estadounidense, ocho soldados de esta nacionalidad murieron y otros nueve resultaron heridos en una operación de seguridad en un lugar no precisado de la provincia de Al Anbar, al parecer en referencia a los combates en Ramadi. La aviación norteamericana bombardeó ayer por la mañana y a primera hora de la tarde diferentes objetivos en el barrio de Al Senai, en el este de Faluya. Un empleado del Hospital Público de Faluya, Jaldun Abdala, dijo que el centro sanitario sólo recibió a un civil iraquí herido. «Seguro que hay muchos más, incluso muertos, pero las ambulancias no pueden llegar hasta allí. La verdad es que existe un cierto temor a que los (norte)americanos abran fuego contra nosotros», confesó.