E.PRESS-LA HAYA
Marruecos, Mauritania, Argelia, Libia y Túnez, los países del
Magreb, acogerán cinco proyectos piloto para la contención de
inmigrantes en la que será la primera etapa para «blindar» a la
Unión Europea de cara a la avalancha de personas sin recursos
económicos que se escuda tras las solicitudes de asilo político.
Las estadísticas revelan que tan sólo el 10% de los demandantes de
asilo lo son realmente, por lo que el 90% «son inmigrantes
económicos que han usado el sistema para entrar en la UE».
El comisario de Justicia e Interior, Antonio Vitorino, explicó que estos proyectos piloto son iniciativa del Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU (ACNUR), quien se encargará de negociar con estos países y de la gestión de los programas que incluirán. Estarán financiados sin embargo por la Comisión Europea y Países Bajos, según anunciaron ayer tras el Consejo informal de Justicia e Interior de la UE que se celebra en La Haya.
La Comisión Europea aportará 800.000 euros y el Gobierno holandés 200.000 euros para su puesta en marcha en los próximos 18 meses.
Aunque el propio Vitorino los denominó «campos» o «centros» de inmigrantes o solicitantes de asilo que estarían gestionados por ACNUR, esta organización se desmarcó esta tarde a través de un comunicado. «Esto es falso», señaló.Los proyectos en el Magreb se incluyen en todo un puzzle legislativo promovido por la Unión Europea en los últimos años, que encamina a la Europa fortaleza. Vitorino explicó así que las personas que sean interceptadas en aguas internacionales deberán ser enviadas a estas instalaciones de tránsito, mientras que aquellos «sin papeles» que sean captados en aguas comunitarias serán trasladado al Estado miembro para la tramitación de su solicitud de asilo o repatriación.