EFE/FRANCE PRESS-BAGDAD
Según cifras proporcionadas por el Ministro iraquí de Sanidad,
alrededor de 20 personas más perdieron la vida y casi 200
resultaron heridas en éste y otros atentados perpetrados en la
capital y la localidad septentrional de Tal Afar, así como en
bombardeos de EEUU sobre la ciudad rebelde de Faluya. El ataque más
sangriento sucedió a media mañana en el barrio de Hay al-Amil, en
el suroeste bagdadí y fue reivindicado anoche por Al Qaeda.
Responsables del depósito de cadáveres del hospital de Yarmuk,
adonde fueron trasladadas las víctimas de este atentado, revelaron
a la prensa que 38 de los fallecidos eran «niños de diferentes
edades». La secuencia de la tragedia, la mayor con víctimas
infantiles en los 17 meses de violencia en Irak, fue muy
dramática.
Decenas de vecinos asistían, animados por la autoridad civil, a la inauguración de una estación de bombeo en el popular barrio de Hay al-Amil cuando disparos con lanzagranadas ARPG causaron varias víctimas y propagaron el pavor entre los asistentes. Soldados norteamericanos que pasaban en un convoy militar procedieron a atender a los heridos en medio de la confusión, momento que aprovechó un conductor suicida para hacer estallar un vehículo cargado con explosivos en medio de la multitud. Según un portavoz de la I División de Caballería del Ejército de EEUU, al menos diez soldados resultaron heridos de diversa consideración. La jornada trágica empezó muy de mañana, cuando un coche bomba estalló frente a un complejo donde se ubican viviendas y oficinas gubernamentales, en el distrito de Abu Gharaib, al oeste de Bagdad.
La explosión causó la muerte a un soldado estadounidense y a dos policías iraquíes y heridas a unas 60 personas, informaron fuentes sanitarias. La policía iraquí precisó que el atentado fue perpetrado en una zona donde se encuentran la comisaría del barrio, el Ayuntamiento y el Registro Civil. En un incidente posterior en Bagdad, un soldado estadounidense murió y otros siete resultaron heridos tras explotar varias granadas lanzadas por insurgentes contra una base militar, informó el mando norteamericano en un comunicado. A primera hora de la tarde, un tercer coche bomba estalló en la localidad de Tel Afar, a unos 450 kilómetros al norte de Bagdad, y dejó al menos cuatro cadáveres y 16 heridos, según fuentes médicas de la ciudad citadas por «Al Yazira».