JOSÉ SEAGE-BAGDAD
Un grupo radical iraquí anunció ayer que ha secuestrado y ejecutado
a tres miembros del Partido Democrático del Kurdistán (PDK), a los
que acusó de colaborar con los «ocupantes» en Irak, mientras que al
menos tres personas murieron en la explosión de un coche bomba en
Samarra. Mientras, otro grupo radical anunció en un vídeo el
secuestro de quince soldados iraquíes y amenazó con matarlos en 48
horas si la Policía no libera a un represente del clérigo rebelde
chií Muqtada al Sadr, detenido el sábado en Bagdad.
En un comunicado colgado en una página en internet, el denominado «Ejército de Ansar al Sunna», afirmó que abandonó los cadáveres de las tres víctimas kurdas decapitadas en una carretera que conduce a la ciudad de Mosul, a unos 400 kilómetros al norte de Bagdad. Explica que las víctimas, originarias de la ciudad de Zajo, cercana a la frontera con Turquía, fueron secuestradas por un comando de la organización radical en una zona próxima a la localidad de Taji, al norte de la capital iraquí.
Por el momento, se desconoce si estos tres asesinatos anunciados tienen relación con los tres cuerpos decapitados y con las manos atadas a la espalda encontrados la semana pasada en la cuneta de una carretera cercana a la localidad de Al Duyail, al norte de Bagdad. Entretanto fuentes militares norteamericanas informaron ayer de que al menos tres personas murieron y otras siete personas resultaron heridas, entre ellas cuatro soldados de EEUU, en la explosión de un coche bomba en la ciudad iraquí de Samarra.
Mientras, un grupo radical anunció el secuestro de quince soldados iraquíes y amenazó con matarlos en 48 horas si la Policía no libera a un represente del clérigo rebelde chií Muqtada al Sadr. En la grabación se ve a un grupo de uniformados sentados en el suelo, y detrás de ellos varios hombres armados y encapuchados.