La Comisión Europea (CE) aprobó ayer una serie de propuestas encaminadas a mejorar la aplicación del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, entre ellas dar más importancia al nivel y evolución de la deuda pública. Estas reformas benefician, sobre todo, a Francia y Alemania.
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, señaló que no se trata de una reforma del Pacto de Estabilidad sino de una evolución basada en la experiencia recogida en los últimos cinco años de su aplicación.
El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, dijo que el crecimiento de la economía y la estabilidad son dos objetivos que tienen que ir de la mano. En relación con la coordinación presupuestaria, Almunia trazó cuatro ideas, entre ellas, prestar más atención a la deuda pública y a la sostenibilidad de las finanzas públicas dentro del proceso de vigilancia presupuestaria. Recordó que hasta ahora el objetivo a medio plazo es lograr unas finanzas públicas cercanas al equilibrio o en superávit, pero ese objetivo puede ser «ajustado o modelado» dependiendo de cuál sea la situación de los países desde el punto de vista de la sostenibilidad y la evolución y la dinámica de la deuda.
Esto no supone crear un Pacto «a la carta» sino aplicar «la racionalidad económica», dado que la Unión Europea ampliada presenta una mayor diversificación económica, explicó. También se descartan sanciones graves a estos países que no logren equilibrar sus finanzas públicas.