El precio del crudo se acercó ayer más que nunca a la barrera psicológica de los 50 dólares por barril, pero la presión alcista aflojó después por tomas de beneficios y expectativas de un posible cese de hostilidades en Irak.
Los contratos futuros para septiembre, que expiraron ayer, llegaron a cotizar a 49,40 dólares por barril durante la primera hora de actividad en el mercado neoyorquino, con lo que marcaba un nuevo máximo histórico.
Sin embargo, hacia la media sesión comenzaron a predominar las ventas de contratos, como reflejo de la intención de los operadores de recoger beneficios en la última jornada de la semana.
Al cierre de la sesión regular, el precio de los contratos para septiembre del Petróleo Intermedio de Texas, el de referencia en Estados Unidos, quedó en 47,86 dólares, después de restar 0,84 dólares al valor de la sesión anterior.
En Londres, el barril en el mercado de Brent terminó con una baja de 79 centavos y se vendió al precio de 43,54 dólares según cifras preliminares.Por otra parte, el economista jefe del Banco Mundial, François Bourguignon, apuntó ayer que el precio del petróleo se estabilizará a medio plazo y se situará en torno a los 32 dólares por barril en el plazo de uno o dos años.
Bourguignon, que participó en un curso de verano de la Universidad Carlos III (Madrid), apuntó que el «nivel de equilibrio» de los precios del crudo ronda los 32 dólares por barril y, por tanto, lo lógico es que el coste del producto se acerque a esta cifra.