EUROPA PRESS-JERUSALÉN
El presidente de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat, anuló ayer
el nombramiento de su sobrino, Musa Arafat, al frente del servicio
de Seguridad General palestina, tres días después de haberlo
nombrado, y ha pedido al general Abdel Razek Majaid, destituido el
sábado, que vuelva a ocupar su puesto.
El nombramiento de Musa Arafat provocó violentos enfrentamientos en Gaza entre las fuerzas de seguridad y miembros del brazo armado de Al Fatá, el partido del propio presidente palestino.
En definitiva, tras la nueva decisión de Arafat, la cosa quedará prácticamente como estaba antes de este pasado fin de semana. El general Majaid tendrá el control del servicio de Seguridad General en los territorios palestinos de Cisjordania y de la franja de Gaza, el general Ismail Jaber dirigirá ese servicio en Cisjordania, Ghazi Jabali volverá a su puesto de comandante de la Policía palestina -sólo cuatro días después de sufrir un secuestro por un grupo que le acusaba de corrupto- y el general Musa Arafat será de nuevo el jefe de la seguridad en la Franja de Gaza, según una fuente oficial citada por AFP.El nombramiento de Musa Arafat al frente del servicio de Seguridad General palestina provocó violentos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y miembros del brazo armado del partido Al Fatá del propio presidente palestino, las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa. El portavoz de las Brigadas, Abu Qusai, declaró a la agencia de información árabe Al Bawaba que sus protestas contra Musa Arafat se debieron al pasado del sobrino del 'rais', a quien estos días llegaron a calificar de «símbolo de la corrupción».
«No estamos en contra de la decisión del presidente Arafat, pero esperamos reformas verdaderas y una intención sincera de combatir la corrupción.
El general Musa es conocido por su corrupción y no pararemos hasta que sea destituido», declaró antes de conocerse la última decisión del dirigente.