Estados Unidos atacó ayer un supuesto refugio del extremista islámico Abu Musab al-Zarqawi en la localidad de Faluya, al oeste de Bagdad, justo el día en que se esperaba la liberación de un rehén filipino y otro egipcio, ambos en poder del grupo que dirige ese presunto terrorista.
El ataque tuvo como objetivo un inmueble del semiabandonado barrio de «Al-Shuhada», en el norte de Faluya, confirmaron fuentes militares en Bagdad.
Varios testigos aseguraron que aviones de combate norteamericanos dispararon tres proyectiles contra el edificio, que quedó parcialmente destruido.
Estados Unidos y el nuevo Gobierno interino iraquí creen que en Faluya, y concretamente en el fantasmagórico barrio de «Al-Shuhada», se refugia el islamista radical de origen jordano Al-Zarqawi, al que se considera la primera amenaza terrorista en Irak.
Washington ofrece una recompensa de veinticinco millones de dólares por la cabeza de Al-Zarqawi, la misma cantidad que por el líder de la red terrorista internacional «Al-Qaida», Osama Bin Laden, con el que se le vincula.
El grupo de Al-Zarqawi, denominado «Tawhid wa Yihad» (Monoteísmo y Guerra Santa), se ha responsabilizado de varios grandes atentados en Irak, el último el perpetrado el sábado con coche-bomba contra el ministro iraquí de Justicia, Malik Dohan al-Hassan, quien salió ileso.