DOGAN TILIC-ANKARA
Cuatro muertos y 20 heridos dejó ayer la explosión de una bomba en
un autobús en Estambul, horas después de que otro artefacto causara
tres heridos al estallar junto al hotel de Ankara que el sábado
alojara al presidente de Estados Unidos, George W. Bush. Los
atentados coinciden con una amplia campaña que grupos islamistas,
comunistas y socialistas han desplegado en protesta por la visita
del líder de EEUU, bajo el lema «Bush, no vengas».
Según fuentes médicas, tres víctimas fallecieron en el lugar del atentado de Estambul, mientras que la cuarta murió al poco de ser ingresada en un centro hospitalario. Otras trece personas continuaban esta tarde hospitalizadas tras ese ataque, en tanto que los restantes siete heridos habían sido para entonces dados de alta.
La explosión tuvo lugar en el distrito de Fatih, cerca de la facultad de Facultad de Medicina de Capa. Según canales de televisión, que citaron fuentes policiales, el artefacto pudo ser una bomba de sonido, que causó tantas víctimas por haber explotado en un lugar cerrado.