EFE-GUADALAJARA
La Cumbre de Guadalajara dio hoy nacimiento a una nueva alianza
entre la UE y Latinoamérica que se perfila como un contrapeso a
Estados Unidos y que se ha estrenado con un fuerte alegato en
defensa de un sistema multipolar que refleje las aspiraciones de
todas naciones. Cuba ha sido de nuevo la nota discordante
repartiendo duras críticas tanto al «imperialismo» de Estados
Unidos como a la «cobardía» de la Unión Europea, lo que generó un
gran malestar. Los dirigentes de 58 países, que representan más de
mil millones de personas y un 30 por ciento de los miembros de
Naciones Unidas, dieron un contundente respaldo al multilateralismo
y a la reforma de la ONU como garantía de orden mundial.
La III Cumbre birregional ha servido como ensayo de concertación política y comercial en favor del multilateralismo, uno de los objetivos de la estrategia europea de seguridad y que se ve con gran simpatía al otro lado del Atlántico. El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, afirmó en su discurso que «el nuevo reto para Europa es construir un sistema multilateral respetado por todos» y que de soluciones concretas a problemas globales.