La mala racha del primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, cuya popularidad anda por los suelos, continúa: su asesor de imagen acaba de dimitir tras ser sorprendido en compañía de una prostituta rumana, de 17 años.
Tres semanas después de que los electores asestaran a Raffarin y su Ejecutivo un masivo voto de castigo en las elecciones regionales, el primer ministro pierde a uno de sus «fieles», Dominique Ambiel, con quien contaba desde su llegada al Gobierno en mayo de 2002.
«El primer ministro ha puesto fin a las funciones de Dominique Ambiel, consejero de comunicación», que presentó su dimisión, informó en un escuetísimo comunicado el servicio de prensa de Matignon, sede del Gobierno, después de que el vespertino «Le Monde» destapara el asunto.
Dominique Ambiel, de 49 años, será juzgado el siete de junio por haber «solicitado, aceptado u obtenido relaciones sexuales de parte de una persona menor de edad que se dedica a la prostitución».