JULIO RIVAS-PUERTO PRÍNCIPE
Los rebeldes haitianos contrarios al presidente Jean-Bertrand
Aristide no parecen dispuestos a dar un respiro al gobernante y en
las últimas horas han lanzado una oleada de nuevos ataques en las
dos principales ciudades del país. Pocas horas después de que la
delegación mediadora -integrada por representantes de Estados
Unidos, Francia, Canadá, la Comunidad del Caribe (Caricom) y la
Organización de Estados Americanos (OEA)- abandonará Puerto
Príncipe tras arrancar a Aristide una serie de concesiones, los
ataques se suceden en el país caribeño.
Cabo Haitiano, la segunda población del país y el último bastión del Gobierno constitucional en el norte, cayó a primeras horas de la tarde de ayer en manos de las fuerzas rebeldes, según las últimas informaciones que llegan a la capital haitiana. En los alrededores de Puerto Príncipe, la localidad de Bon Repos -situada en la Ruta Nacional 1 que conecta la capital con Gonaives (también tomada por los rebeldes)- ha sufrido también varios ataques en las últimas horas, que causaron al menos dos muertos.
El último ataque, registrado a primeras horas de la mañana de ayer dejó al menos un muerto entre los atacantes, pero vecinos de la población indicaron que un policía y dos partidarios de Aristide también murieron durante el asalto a la comisaría que se produjo en la noche del sábado.Mientras en los alrededores de Puerto Príncipe se producían los enfrentamientos entre los rebeldes armados y las fuerzas policiales, reforzadas por partidarios de Aristide, en el centro de la capital haitiana se mezclaban los ciudadanos que acuden para celebrar el Carnaval con las manifestaciones de la oposición al presidente.