AGENCIAS-LONDRES/WASHINGTON
La esposa del primer ministro británico, Tony Blair, Cherie Booth,
considera que el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, es
un mandatario «ilegítimo» que viola los derechos humanos por
permitir la pena de muerte en su país, según figura en un libro
sobre la familia Blair cuyos extractos han sido divulgados por el
diario londinense The Times.
En su libro Tony Blair: La creación de un líder mundia-una biografía de 250 páginas que será publicada el próximo marzo en Estados Unidos y Reino Unido-, el escritor y periodista inglés Philip Stephens afirma, citando fuentes de Downing Street, que Cherie Booth considera a Bush un «presidente ilegítimo» que «robó el cargo presidencia a su rival demócrata Al Gore».
La biografía narra además una cena que mantuvieron los Bush con la familia Blair en Londres, durante el verano del 2001, en la que Cherie agredió verbalmente al presidente norteamericano por sus ideas sobre la pena de muerte en Estados Unidos y por haber firmado más de 150 ejecuciones cuando ejercía como gobernador de Texas. «Conviene recordar que Cherie Blair es una experta y destacada jurista en derechos humanos y derechos de la mujer», por lo que «estas medidas de Bush la sacan de sus casillas», escribe Stephen en su obra. El libro revela también que la esposa de Blair «no soporta» a la primera dama estadounidense, Laura Bush, a la que considera «cerrada, obtusa y demasiado conservadora». Según The Thimes, el primer ministro británico «está avergonzado» de que su esposa haya expresado «tan abiertamente» sus opiniones contrarias a Bush.
Mientras la edición de The Times salía a la calle, el presidente Bush comparaba al primer ministro británico, Tony Blair, con el ex primer ministro Winston Churchill. «En su determinación a hacer lo que está bien y no lo que es fácil, veo el espíritu de Churchill en el primer ministro Tony Blair», afirmó Bush durante un discurso para inaugurar una exposición dedicada a Winston Churchill (1874-1965) en Washington.
George W. Bush y Tony Blair lanzaron en marzo de 2003 y a pesar de la oposición de Naciones Unidas y varios países, una guerra contra Irak, al que acusaba de poseer armas de destrucción masiva (ADM).
Ambos se han visto presionados a crear una comisión sendas comisiones de investigación para intentar explicar por qué no fue encontrada ningún ADM en Irak desde la caída del dictador iraquí Sadam Husein en abril. Bush mantenía ayer que hizo lo correcto al lanzar la guerra en Irak, dada la información disponible, aunque aún no se han encontrado las armas de destrucción que supuestamente escondía ese país. «Dado lo que sabíamos entonces y lo que sabemos ahora, Estados Unidos hizo lo correcto en Irak», dijo Bush durante una breve visita a Charleston (Carolina del Sur).