El jefe del Gobierno español, José María Aznar, afirmó que la falta de acuerdo sobre la Constitución Europea no se debe a la presidencia italiana de la UE ni a España, que ofreció «media docena larga de alternativas», sino a quienes no manifestaron su voluntad de consenso «con la misma firmeza».
Aznar, al ser preguntado por la responsabilidad de Francia en el fracaso de la cumbre, subrayó que no quiere «señalar a nadie con el dedo» ni criticar a ningún país, aunque sabe «muy bien» lo que ha pasado y conoce «las posiciones de todos».
Sí replicó en cambio al presidente francés, Jacques Chirac, que no sabe «qué ha cambiado» desde el Consejo de Niza para que se quiera modificar el reparto de poder pactado en aquella ciudad, porque la ampliación de la UE ya estaba entonces en marcha y existían las mismas diferencias de población entre los países más grandes.
«Habrá cambiado probablemente la opinión de Francia», apuntó al respecto, e insistió en que «respeta» el cambio de opinión de algún país, pero también «constata» que esa modificación se ha producido.
En todo caso, aunque recordó que España siempre ha sido partidaria de intentar lograr un acuerdo sobre la Constitución antes de que concluyera la presidencia italiana, restó importancia al fracaso de este «ambicioso» objetivo e indicó que «era uno de los escenarios posibles» y demuestra que no existe todavía el «punto de maduración» suficiente para lograr el consenso.