EFE-ESTOCOLMO
La ministra sueca de Exteriores, Anna Lindh, fue apuñalada ayer por
un desconocido cuando estaba de compras en unos almacenes de
Estocolmo, agresión que despertó el fantasma del asesinato del que
fuera primer ministro Olof Palme y ha hecho suspender la campaña
del referendo sobre el euro, este domingo.
La vida de Lindh parece que no corre peligro, aunque permanecerá ingresada en el Hospital Karolinska de Estocolmo.
Lindh recibió heridas graves en el pecho, vientre y uno de sus brazos y, pese a que está siendo intervenida quirúrgicamente en el centro hospitalario desde las cinco y media, fuentes del Gobierno sueco insisten en que está fuera de peligro.
Según el secretario de prensa de la ministra, Dan Svanell, la herida más grave es la que sufrió en el vientre, pero insistió en que no dará detalles sobre las lesiones hasta que termine la operación.
El suceso se produjo a primera ahora de la tarde de ayer, cuando la ministra salió sin escolta de su despacho y se fue hasta unos grandes almacenes para comprarse ropa.
En ese momento, un hombre se acercó a ella, la arrojó al suelo y la apuñaló ante la mirada atónita del resto de clientes.La Policía organizó inmediatamente un dispositivo de búsqueda para localizar al responsable de la agresión, a quien testigos presenciales describen como un hombre fuerte, de apariencia sueca, de 1,80 de altura y vestido con una chaqueta de camuflaje militar.