El secretario de Defensa de EEUU, Donald Rumsfeld, dijo ayer ante el Congreso que la invasión de Irak no se llevó a cabo porque hubiera nuevas evidencias sobre los supuestos arsenales de destrucción masiva del régimen de Bagdad.
«La coalición no actuó porque hubiéramos descubierto nuevas y espectaculares evidencias del intento de Irak por hacerse con armas de destrucción masiva», dijo el jefe del Pentágono en una comparecencia ante el Comité de Servicios Armados del Senado. Esta intervención se produce en el marco de la creciente polémica por la incapacidad de las tropas aliadas de encontrar las supuestas armas químicas, biológicas y nucleares del régimen de Sadam Husein, y las evidencias de que, además, se usó información incorrecta sobre los presuntos intentos de Irak de obtener armas nucleares. La Casa Blanca reconoció por primera vez el martes que se equivocó al dar crédito a un informe del espionaje británico según el cual Bagdad trató de comprar uranio en Níger para un supuesto programa de armas nucleares y que el presidente George W. Bush incluyó en su discurso sobre el Estado de la Unión el 28 de enero.
«Sabiendo lo que sabemos ahora, la referencia al intento de Irak de adquirir uranio en Africa no debería haber sido incluida en el discurso», afirmó la Casa Blanca en un comunicado.«Actuamos porque vimos las evidencias ya existentes bajo una nueva luz, bajo el prisma de nuestra experiencia del 11 de septiembre», declaró el secretario de Defensa.Por su parte, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, aseguró ayer en Pretoria haber hecho «lo correcto» al atacar Irak, pese a que no se ha demostrado que ese país poseyera las armas de destrucción masiva que presuntamente motivaron la invasión. Preguntado si todavía cree que Irak intentaba comprar uranio en Africa, como afirmó en su discurso sobre el estado de la nación ante el Congreso el pasado enero, Bush fingió entender mal la pregunta y contestó: «¿si (Sadam Husein) está intentando comprar uranio? Ahora no está intentando comprar nada, está fugado».